Cuando se ponen a prueba todos tus defectos
en la noche llena de silencio y melancolía
reaparecen los malos triunfos, amargos
sabores del pasado.
Recordando los fracasos más simples de tu
existencia
Pensando en regresar a lo mas impuro de tu
oscuridad
lamentas haberte perdido los caminos que
llegan al desprecio.
Escoges la risa inestable del amor.
Carcajadas eternas de hipocresía, susurro
de sobras.
Cambias el lamento por agonía y siembras de
música.
Porque el haberte convertido en un ser
suspicaz del desengaño
te alimenta la esperanza, la boca del deseo
y de las ansias.
No mal interpreten, todo es importante.
Te levantas, miras al espejo, y sigues sin
entender.
Soque
Martes, 28 de agosto de 2012